Antes de Truvy, tenía varios trabajos y todavía luchaba por llegar a fin de mes. Me perdí muchas cosas con mi familia por estar tanto tiempo fuera. En un momento dado recibimos cupones de alimentos dos veces, utilizamos la asistencia de WIC y siempre parecíamos estar atrasados en el pago de nuestras facturas. ¡Unos $25 adicionales me dejarían en un agujero financiero durante semanas! Después de Truvy, pude trabajar duro y convertirlo en mi ingreso de tiempo completo, lo que significó que ya no tenía que estar lejos de mis hijos. Ahora tengo una oficina en casa desde la que trabajo o, cuando estoy fuera, mi teléfono. Ya no tengo que estar lejos de mi familia y puedo disfrutar cada minuto y cada hito con mis hijos.
